Más del 60% de los ciudadanos desaprueban a sus autoridades en BCS
La desconfianza ciudadana hacia los funcionarios de Baja California Sur se ha disparado en abril de 2025, en un contexto marcado por el aumento de conflictos ambientales y hechos violentos en el estado, como el enfrentamiento que autoridades tuvieron en Cabo San Lucas recientemente.
Una reciente encuesta realizada por Métrica Consultores revela que más del 60% de los sudcalifornianos desaprueban la gestión de sus principales gobernantes.
¿Qué tanto desaprueban los ciudadanos a gobernantes de BCS?
De acuerdo con una encuesta telefónica realizada entre el 8 y el 12 de abril a 400 ciudadanos mayores de 18 años, el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío cuenta apenas con el 38% de aprobación, mientras que el 62% de los encuestados expresó su desaprobación a su gestión
En Los Cabos, el alcalde Christian Agúndez obtuvo también un 38% de aprobación y un 62% de desaprobación, mientras que la representante municipal de Cabo San Lucas, Karina de la O, apenas logró el respaldo del 28% de los ciudadanos, acumulando un 72% de desaprobación.
Estos niveles de rechazo se producen en medio de una serie de hechos violentos que han sacudido al estado en las últimas semanas.
¿Cómo afecta la ola de violencia a la percepción pública?
En La Paz, colectivos de búsqueda y autoridades han reportado el hallazgo de fosas clandestinas en diferentes zonas, evidenciando una crisis de seguridad que, hasta ahora, no había alcanzado tales dimensiones en Baja California Sur.
Además, en Los Cabos, los recientes ataques armados contra unidades de transporte público provocaron la suspensión temporal del servicio, afectando directamente la movilidad de miles de trabajadores y estudiantes.
Ante la ola de ejecuciones y actos violentos, el gobernador Víctor Castro solicitó formalmente la intervención del gobierno federal encabezado por Claudia Sheinbaum, reconociendo que el estado atraviesa una situación crítica en materia de seguridad.
Sin embargo, la respuesta de otras instancias estatales ha sido cuestionada: el procurador general de Justicia de BCS ha sido duramente criticado por su silencio ante los recientes acontecimientos.
¿Qué papel puede jugar el conflicto ambiental en la desaprobación?
A la par de los problemas de seguridad, la crisis ambiental y los conflictos relacionados con el desarrollo turístico también pueden contribuir al deterioro de la imagen de las autoridades.
Durante los últimos meses, Baja California Sur ha enfrentado advertencias serias sobre el riesgo de un “Día Cero” en su sistema de agua potable, un fenómeno asociado al crecimiento urbano desmedido y a la falta de regulación efectiva de los nuevos desarrollos inmobiliarios y turísticos.
Proyectos como Saguaro Energía, que plantea el transporte de gas natural licuado (GNL) a través del Golfo de California, han generado protestas ciudadanas y llevaron al Congreso local a pedir su bloqueo inmediato.
Además, el reciente cierre del acceso público a Playa Ensenada Blanca en Loreto, provocado por un hotel privado, reavivó el debate sobre la privatización de espacios naturales, generando una ola de indignación en redes sociales y movilizaciones de vecinos.
En Los Cabos, CONAGUA presentó denuncias penales contra particulares por invasiones ilegales en cauces de arroyos, una problemática que no solo afecta el ecosistema, muestra una profunda desorganización de uno de los municipios con mayor proyección internacional.
La carencia de vivienda y servicios básicos, sirve a estafadores y abusivos para generar recursos mediante el engaño vendiendo zonas irregulares, sin reacción clara de parte de las autoridades locales. Además se incrementa el riesgo de desastres durante la temporada de lluvias, pues son zonas con importante flujo de agua.
¿Qué reflejan los datos sobre la confianza ciudadana?
A pesar de las iniciativas anunciadas para atender estos temas, los resultados de la encuesta confirman una creciente desconfianza ciudadana hacia los gobiernos municipal y estatal.
La violencia, la falta de agua, los proyectos energéticos polémicos que no son amables con el ambiente y no terminan de responder a las necesidades de la población, la sensación de que los intereses privados prevalecen sobre el interés público marcan un escenario complejo para la administración de Víctor Castro y sus aliados.