Veterinarios piden a diputados de CDMX legislar para frenar agresiones hacia su gremio
CIUDAD DE MÉXICO.- La violencia contra los médicos veterinarios en la CDMX y en el resto del país ha ido en aumento, generando preocupación en el gremio. A meses del asesinato del veterinario zootecnista Héctor Hernández Cañas, representantes del sector exigen a las autoridades medidas urgentes para garantizar su seguridad y evitar nuevas agresiones.
¿Cuáles son las principales amenazas para los veterinarios?
Los ataques contra los profesionales de la salud animal incluyen agresiones físicas, amenazas e intimidaciones, muchas veces motivadas por acusaciones de negligencia médica o desacuerdos con los tratamientos aplicados a las mascotas.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la capital del país registra un promedio de 228 agresiones anuales contra veterinarios, de las cuales el 90% no se denuncian por miedo a represalias o desconfianza en las autoridades.
Sin embargo, se espera que tras el caso de Héctor, esa cifra disminuya, pues este acontecimiento ha logrado que más veterinarios en distintos estados de la república, alcen la voz y se manifiesten en contra de la violencia hacia su gremio.
¿Qué acciones propone el Movimiento Veterinario para parar la violencia?
Durante “La chilanguera” del partido Morena, Juan Jorge Avilés, vocero del Movimiento Veterinario, pidió al Congreso de la Ciudad de México implementar estrategias para dignificar y proteger a los profesionales del sector. Entre las propuestas destacan:
- Reforma al Código Penal Local para tipificar como agravante las amenazas, extorsión, acoso y agresiones físicas o digitales contra los veterinarios.
- Modificación de la Ley de Protección y Bienestar de los Animales para incluir la responsabilidad del tutor al solicitar servicios veterinarios. En caso de omitir indicaciones médicas, podría considerarse maltrato animal.
- Creación de un padrón voluntario de clínicas veterinarias certificadas que cuenten con distintivos gubernamentales de seguridad.
- Implementación de una línea de apoyo emocional y psicológico para los veterinarios.
- Capacitación sobre el uso de sistemas de denuncia y seguimiento de agresiones para garantizar medidas efectivas contra los agresores.
¿Hay una solución a corto plazo para la violencia que sufren los veterinarios?
El gremio veterinario ha levantado la voz, realizando marchas y exigiendo respuestas inmediatas. Mientras las propuestas son evaluadas por las autoridades, los profesionales de la salud animal continúan ejerciendo su labor en un ambiente de creciente hostilidad.
La demanda es clara, un alto a la violencia y una mayor protección para quienes dedican su vida al cuidado de los animales.
