Sismo de 6.2 en Turquía alarma a Estambul
Este miércoles 23 de abril, Turquía experimentó una serie de tres sismos en un lapso de 40 minutos, el más fuerte con una magnitud de 6.2. El epicentro se localizó cerca de Silivri, a unos 80 kilómetros al suroeste de Estambul, según la Presidencia de Gestión de Desastres y Emergencias de Turquía (AFAD).
El temblor principal se registró a las 12:49 hora local (09:49 UTC), con una profundidad de 10 kilómetros y fue seguido por dos réplicas de magnitudes 5.0 y 4.4, generando escenas de pánico y colapsos en líneas de telecomunicación. Pese a la magnitud del evento, hasta el momento no se han reportado víctimas mortales ni daños estructurales significativos.
Estambul, la ciudad más poblada del país, sintió con fuerza el sismo, lo que generó alarma en toda la región del Mar de Mármara. Las autoridades se mantienen en alerta ante la posibilidad de nuevas réplicas.
¿Podría este sismo ser una advertencia de un evento mayor?
Miembros de la comunidad científica turca han señalado que este evento podría ser un aviso de una ruptura mayor en la zona. El profesor Naci Görür, miembro de la Academia de Ciencias, advirtió en su cuenta de X que este no es el gran terremoto que se espera en Mármara, pero que aumenta la tensión acumulada en la falla de Kumburgaz, lo que podría desencadenar un sismo superior a magnitud 7.
¿Qué dicen los expertos sobre el riesgo sísmico en la región?
En entrevista el geólogo y también académico Prof. Dr. Okan Tüysüz explicó que desde el terremoto del 17 de agosto de 1999 se espera un gran evento sísmico en esta región. Señaló que se trata de una falla bloqueada que acumula tensión, y que algunos segmentos pueden romperse y liberar energía en forma de sismos como el ocurrido hoy.
Tüysüz afirmó que serían necesarios al menos 30 sismos de magnitud 6 para liberar la energía que se espera en un terremoto de magnitud 7. “Este sismo liberó algo de energía, pero no es suficiente para evitar el gran terremoto que se espera”, advirtió.