Elon Musk no es un genio

CIUDAD DE MÉXICO.- Elon Musk presentó sus nuevos vehículos y robots que lucen muy similares al mundo imaginadoen la película Yo Robot pero que por la estética policial y fascista recuerda también mucho a Robocop. Varios de los vehículos de Tesla parecen diseñados para habitar el mundo apocalíptico que se nos vende constantemente desde el cine pero que también se prestan para imaginar políticas de represión absoluta.Las compañías de Musk están diseñando el futuro a un ritmo acelerado y sin duda esto le ganará su paso a los libros de historia. Sin embargo aún con toda la innovación producto de sus compañías y de la gente que trabaja para él, es imposible no ver el otro lado de la cara que muestra día con día en Twitter: su personalidad, sus ideas, sus fantasías. Tanto que esto mismo lo expone no como genio sino sólo como un millonario que está impulsando cambios a futuro quizá no por el bien de la humanidad sino de sus propios intereses.Esos diseños, prototipos y tecnología que quiere vender a todo el mundo no son para liberarnos y estimular la creatividad de las personas sino para poder tener un control absoluto a futuro de las policías internacionales, de los servicios, del internet y de los derechos para huir del planeta en caso que sea necesario. Su apuesta y la de muchos multimillonarios nunca ha sido cómo mejorar el mundo, porque podrían hacerlo de verdad, sino cómo tener más poder, riqueza, cómo controlar mejor los medios de producción y en caso de que sea necesario, mudarse fuera del planeta en búsqueda de una mejor vida.Si bien muchos quieren comparar a Musk con Ironman deberíamos más bien de ser honestos y entender que se parece más a Lex Luthor. Frecuentemente muchas de las ideas creativas que expone gente con dinero no son propias sino de su equipo de trabajo.Ver nota:La desproporcionada desigualdad económica en América Latina

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