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Extensión de regularización de Autos Chocolate hasta 2026: implicaciones y reacciones

Extensión del mecanismo de regularización de 'Autos Chocolate' hasta 2026: implicaciones y reacciones

Por: Alejandro Villaseñor

CIUDAD DE MÉXICO.- El gobierno federal ha emitido un nuevo decreto que extiende hasta septiembre de 2026 el mecanismo de regularización de vehículos de procedencia extranjera, comúnmente conocidos como “autos chocolate”. Esta decisión, publicada en la edición vespertina del Diario Oficial de la Federación, se produce justo antes del cierre de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, cuyo último día en el cargo será el 30 de septiembre.

La justificación detrás de esta medida radica en la positiva recepción del programa entre la ciudadanía y la persistente demanda por parte de aquellos que buscan regularizar sus vehículos. Desde su implementación, se han regularizado aproximadamente 2 millones 559 mil 256 autos en varios estados del país, otorgando así certeza jurídica a sus propietarios y contribuyendo a la seguridad pública al facilitar la identificación de los mismos.

¿Qué son los “autos chocolate”?

Los denominados “autos chocolate”, una expresión coloquial en México que se refiere a vehículos de procedencia ilegal o no regularizados, han aumentado su presencia en las calles del país en los últimos 15 años. Esta tendencia ha despertado preocupaciones tanto en el ámbito social como en la industria automotriz nacional.

Estos vehículos, que comprenden un vasto catálogo de marcas y modelos, suelen ser automóviles que ya no se comercializan en México por concesionarios o que nunca han estado disponibles en el mercado mexicano. De acuerdo con cifras recientes, el 95 por ciento de estos automóviles proviene de Estados Unidos, mientras que el 5 por ciento restante llega de otras regiones, como Centro y Sudamérica. Este fenómeno ha crecido en parte debido a la migración y a la incapacidad de gran parte de la población de adquirir automóviles nuevos, una situación que ha hecho que muchos opten por vehículos de segunda mano o de origen extranjero.

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Beneficios Económicos y Sociales

El impacto económico del decreto es notable. Hasta la fecha, la regularización de estos vehículos ha generado ingresos por alrededor de 6 mil 398 millones de pesos, que se han destinado a acciones de infraestructura, incluyendo proyectos de pavimentación en diversos municipios. Esta inyección de recursos ha beneficiado no solo a los propietarios de los autos regularizados, sino también a las comunidades en las que residen, mejorando la calidad de vida de sus habitantes.

Los estados que se beneficiarán de esta extensión incluyen Baja California, Jalisco, Nuevo León y Sonora, entre otros. La regularización no solo busca dar certeza a los ciudadanos, sino también prevenir el uso de estos vehículos en actividades delictivas, al permitir una mejor identificación de los propietarios.

Reacciones de la Industria Automotriz

Sin embargo, la medida ha generado controversia, especialmente entre los sectores de la industria automotriz nacional. Los críticos del decreto argumentan que esta política fomenta la circulación de “chatarra automotriz” y facilita la formalización de contrabando vehicular. La industria ha expresado su preocupación por el impacto que esto podría tener en las ventas de vehículos nuevos, así como en la competitividad del sector.

Conclusiones

La decisión del gobierno federal de extender la regularización de “autos chocolate” hasta 2026 refleja una estrategia dual: por un lado, busca atender una necesidad social y económica, y por otro, enfrenta la oposición de una industria que se siente amenazada. Con el nuevo decreto, el gobierno pretende seguir brindando certidumbre a millones de propietarios de vehículos de procedencia extranjera, mientras que las repercusiones en el mercado automotriz nacional continuarán generando debate en los próximos años.

La medida, que ha tenido un total de ocho extensiones desde su implementación hace dos años, deja entrever un enfoque del gobierno que prioriza la inclusión y la seguridad, en un contexto donde la regularización vehicular sigue siendo un tema candente en la agenda pública.