Tos ferina estos son los antibióticos que curan la enfermedad
MONTERREY, Nuevo León.- Luego de que la secretaria de Salud de Nuevo León, Alma de la Rosa Marroquín, confirmara la muerte de una bebé de mes y medio a causa de la tos ferina , la comunidad médica y las autoridades sanitarias han encendido las alertas sobre esta enfermedad.
La tos ferina, también conocida como tos convulsiva, es una infección altamente contagiosa de las vías respiratorias causada por la bacteria Bordetella pertussis.
¿Cuáles son los síntomas de la tos ferina?
Los primeros síntomas de la tos ferina pueden confundirse con un resfriado común: secreción nasal, fiebre leve y tos.
Sin embargo, con el tiempo, la tos se vuelve intensa, provocando accesos de tos incontrolables que pueden derivar en vómitos y dificultad para respirar.
En bebés menores de seis meses, la enfermedad puede ser especialmente grave, lo que aumenta el riesgo de complicaciones y mortalidad .
¿Cómo se previene la tos ferina?
La principal estrategia de prevención es la vacunación.
La vacuna DPT (difteria, pertussis y tétanos) se administra en varias dosis durante la infancia y es clave para reducir la incidencia de la enfermedad.
Además, se recomienda la inmunización de mujeres embarazadas en el tercer trimestre para proteger al bebé en sus primeros meses de vida.
Las medidas higiénicas, como el lavado de manos y el uso de mascarillas en caso de síntomas respiratorios, también pueden ayudar a frenar la propagación de la bacteria.
¿Qué antibiótico cura la tos ferina?
El tratamiento con antibióticos es fundamental para eliminar la bacteria y evitar su transmisión. Los medicamentos más utilizados incluyen:
- Azitromicina: recomendada para bebés menores de un mes y niños mayores de seis meses.
- Eritromicina: utilizada en personas de todas las edades, especialmente como medida preventiva.
- Claritromicina: indicada para niños mayores de seis meses.
- Trimetoprim-sulfametoxazol: alternativa para personas alérgicas a los macrólidos.
Si bien estos antibióticos eliminan la bacteria, no alteran el curso de la enfermedad, por lo que el tratamiento debe complementarse con cuidados médicos adecuados .
Ante cualquier síntoma sospechoso, se recomienda acudir de inmediato al médico para un diagnóstico y tratamiento oportunos.
