Día de Muertos: esta es la tumba de víctimas de la Casa de Aramberri

MONTERREY, Nuevo León.- Hace 90 años y en pleno centro de Monterrey, un crimen que sacudió a toda la comunidad por el homicidio de doña Antonia Lozano y su hija Delfina Montemayor, quienes fueron brutalmente asesinadas en su hogar en su casa ubicada en la calle Aramberri.  

  

¿Qué sucedió realmente aquella noche en la casa de Aramberri?

El 5 de abril de 1933, Monterrey fue testigo de un crimen atroz que sacudió la tranquilidad de la ciudad.

Se cuenta que ese día, para aprovechar el día las mujeres decidieron ponerse ropa cómoda para salir a caminar un rato, pero con lo que no contaban es que minutos antes de salir de casa alguien tocó la puerta y una de ellas se aproximó para abrirla.

Para su mala suerte se trataba de cuatro hombres que las amenazaron con cuchillo en mano y les exigieron todos los objetos de valor con los que contaban en la vivienda, pero ellas se opusieron.

Entre el forcejeo y los gritos, uno de los ladrones habló por error, y Antonia Lozano rápidamente identificó su voz; se trataba de su sobrino Gabriel.

Al verse sorprendido, ordenó a sus cómplices abusar de las dos mujeres y asesinarlas con los cuchillos que portaban.  

¿Quién fue testigo del asesinato de las mujeres?

Después del crimen, el sobrino y sus cómplices huyeron; y al llegar el padre de familia a la casa, Don Delfino descubrió el atroz asesinato.

Fue la mascota de la familia un loro, quien compartió el punto clave para comenzar a resolver este caso, el animal gritaba una y otra vez: “no me mates Gabriel, no me mates Gabriel”; este loro fue el único testigo que habló de aquel brutal ataque hacia las dos damas.

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¿En qué panteón descansan los restos de la familia Montemayor?

A casi un siglo de los hechos, la memoria de esta tragedia persiste y los restos de ambas mujeres y el padre de familia descansan en el panteón Dolores, situado sobre la calle Nicolás Bravo y José Silvestre Aramberri.

Este sitio se ha convertido en un punto de interés tanto para familiares como para curiosos atraídos por el misterioso caso, en redes sociales existen videos donde usuarios muestran cómo luce la tumba de la familia, reafirmando que la tragedia de la familia Montemayor es un hecho real y no solo una leyenda urbana de la ciudad.

 

¿Cómo luce la tumba de la familia Montemayor Lozano?

La tumba de la familia que se encuentra en buen estado y está recubierta de mármol y guarda los nombres de Antonia, Florinda y Delfino; se puede leer la fecha del terrible crimen, recordando el 5 de abril de 1933, día en que madre e hija fueron asesinadas.

Junto a los nombres, se leen emotivos mensajes grabados por Delfino Montemayor, esposo y padre de las víctimas. A su esposa, le dedicó la inscripción: 'Su afligido esposo dedica este recuerdo en su memoria', mientras que para su hija Florinda dejó grabadas las palabras: 'El reflejo de tu imagen está latente en mi corazón, fuiste modelo de hija, por eso mereciste el cielo'.

Este lugar no solo acoge a quienes desean rendir homenaje a las víctimas, sino también a aquellos que sienten interés por la historia del crimen de Aramberri, un caso que ha trascendido a través del tiempo, convirtiéndose en parte del patrimonio histórico y cultural de Monterrey.

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