SEDEMA recupera 4.6 hectáreas de suelo de conservación invadido en Xochimilco
En una ciudad tan grande y densamente poblada como la CDMX, cuidar del suelo de conservación es clave para garantizar un futuro ambientalmente equilibrado y sostenible.
CIUDAD DE MÉXICO.- La CDMX es una de las ciudades donde los desalojos de inmuebles y terrenos ocupados ilegalmente son más frecuentes. Desde desalojos como el de las familias que ocupaban un predio intestado en Azcapotzalco, hasta de terrenos destinados a la conservación ambiental, las autoridades han intensificado los operativos para recuperar espacios tomados de manera irregular.
Y ahora la atención se ha centrado en la protección del suelo de conservación en Xochimilco, esto después de que algunas hectáreas fueran ocupadas ilegalmente.
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¿Por qué desalojaron el suelo de conservación en Xochimilco?
En un operativo coordinado por la Secretaría del Medio Ambiente (SEDEMA) y otras dependencias de la CDMX, se logró la recuperación de 4.6 hectáreas de suelo de conservación en el paraje Zacapa, Xochimilco. Este terreno, con vocación agrícola, había sido ocupado de manera irregular.
Como parte del proceso de restitución, las autoridades retiraron 12 construcciones improvisadas, eliminaron delimitaciones hechas con alambre de púa y postes de madera, y retiraron 33 metros cúbicos de residuos.
En la operación participaron 157 elementos de diversas dependencias, incluyendo la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y la Secretaría de Obras y Servicios (SOBSE). A pesar de la magnitud del operativo, se realizó sin incidentes, priorizando el respeto a los derechos humanos y el diálogo con las personas involucradas.
De hecho, esta no es la primera que se recupera este tipo de espacios, pues apenas en diciembre pasado una situación similar se vivió en la alcaldía Tláhuac, cuando autoridades también recuperaron suelo de conservación en donde había un asentamiento irregular.
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¿Por qué es crucial proteger el suelo de conservación en la CDMX?
El suelo de conservación representa el 59 % del territorio capitalino y cumple funciones ecológicas esenciales. Estos espacios ayudan a regular el clima, recargar los mantos acuíferos, capturar carbono y generar oxígeno. Además, son testimonio vivo de las prácticas agrícolas ancestrales que han dado identidad a Xochimilco por siglos.
La expansión urbana, muchas veces ilegal, pone en riesgo estos ecosistemas, favoreciendo la deforestación y alterando el equilibrio ambiental. Por ello, el gobierno de la CDMX ha reforzado su estrategia para evitar el cambio de uso de suelo y frenar la urbanización en zonas ecológicamente sensibles.
¿Qué sigue para la protección del suelo de conservación?
Las autoridades han dejado claro que los operativos de recuperación continuarán. La conservación de estos terrenos no solo es una cuestión ecológica, sino también de seguridad y sustentabilidad para la ciudad.
En una ciudad tan grande y densamente poblada como la CDMX, cuidar estos espacios es clave para garantizar un futuro ambientalmente equilibrado y sostenible. Además, es importante mencionar que en CDMX existe la Ley Ambiental, la cual multa con sanciones económicas bastante severas a quienes, entre otras cosas, dañen o alteren el suelo de conservación.
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