Protestan en Tecámac por el abuso de una menor de 3 años dentro de guardería del IMSS
Los hechos ocurrieron en una guardería del IMSS en Tecámac Estado de México
ESTADO DE MÉXICO.- En México, la impunidad en casos de violencia infantil sigue siendo una problemática alarmante. Las víctimas y sus familias enfrentan largos procesos legales, revictimizaciones y, en muchas ocasiones, la indiferencia de las autoridades.
En este contexto, un grupo de activistas salió a las calles de Tecámac, Estado de México, para exigir justicia por una menor de tres años que, según denuncias, fue víctima de abuso sexual dentro de una guardería del IMSS.
Una madre en busca de justicia
Frida Hernández, madre de la niña afectada, presentó una denuncia en septiembre del año pasado contra la guardería Mi Pequeño Mundo, donde, según los exámenes médicos, su hija sufrió abuso sexual. A pesar del tiempo transcurrido, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) no ha mostrado avances significativos en la investigación.
Todo comenzó cuando la menor manifestó molestias en su zona íntima. Su madre, creyendo que se trataba de estreñimiento, la llevó al médico. Sin embargo, tras una revisión, el doctor le recomendó acudir al DIF para una evaluación más detallada. Posteriormente, un médico legista de la FGJEM confirmó la agresión.
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Protestas ante la falta de respuestas
Han pasado seis meses desde la denuncia y Frida sigue sin obtener justicia. Ante la falta de respuestas, organizó junto con un grupo de mujeres una protesta pacífica frente a la guardería.
Exigiendo justicia para que el caso no quede impune con carteles que decían:
- "Justicia para Ely"
- "Los niños no se tocan"
- "Pudo ser tu hijo"
Sin embargo, la respuesta del personal de la guardería fue indignante. De acuerdo con Frida, durante la manifestación, empleados del lugar reaccionaron con burlas, pusieron música y bailaron desde el interior del establecimiento, ignorando la gravedad de la acusación.
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Intimidaciones y obstáculos en el proceso
Además de la falta de avances en la investigación, Frida ha denunciado que ha recibido intimidaciones para frenar su proceso legal. También ha notado que la guardería ha implementado constantes cambios en su personal, lo que podría dificultar la identificación de los responsables.
Mientras tanto, su hija sigue enfrentando secuelas psicológicas y físicas debido a la agresión. La madre exige justicia y medidas efectivas para garantizar que ningún otro niño pase por la misma situación.
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Un llamado a la justicia y a la conciencia social
Casos como el de Ely evidencian las fallas del sistema de justicia en la protección de la infancia y la urgencia de actuar con mayor firmeza ante la violencia infantil. Las autoridades deben garantizar investigaciones efectivas y sanciones ejemplares, pero también es responsabilidad de la sociedad no callar ante estos crímenes.
La lucha de Frida no es solo por su hija, sino por todos los niños que han sido víctimas de abuso y han quedado en el olvido. La justicia no puede seguir siendo un privilegio, sino un derecho inquebrantable para la niñez.
