Sin prejuicios: Muestra Adrián Marcelo la vida nocturna gay de PV
A través de su canal de YouTube, Adrián Marcelo presumió cómo se vive la vida nocturna en la llamada zona romántica, sitio donde se reúne la comunidad LGBTIQ en Puerto Vallarta
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MONTERREY, Nuevo León.- Sin prejuicios y muy a su estilo, Adrián Marcelo se lanzó a la aventura de mostrar cómo es la vida nocturna gay en uno de los sitios turísticos nacionales por elección entre dicha comunidad.
A través de su canal de YouTube “Radar” el presentador se fue a Puerto Vallarta y mostró el ambiente nocturno que tiene la llamada Zona Romántica, que viene siendo el punto de reunión donde la comunidad gay sale a divertirse por las noches.
Estamos en Puerto Vallarta, el destino gay por excelencia en la República Mexicana, desde un lugar donde los canadienses, los europeos, los americanos, los gringos del vecino país se escapan cuando hace mucho frío en sus zonas.
En este episodio, Adrián Marcelo muestra los distintos antros y bares a los que acuden los chicos de la comunidad y el ambiente que se vive en ellos, donde sin duda, el conductor fue reconocido por algunas personas, que al verlo le pidieron tomarse la ya tradicional selfie.
El también influencer tuvo la oportunidad de platicar con algunos chicos que se hallaban en estos puntos de reunión y de esparcimiento a quienes les preguntó la razón por la cual Puerto Vallarta se ha convertido en la capital gay de México, por lo que muchos respondieron que por su seguridad, mientras que otros señalaron que ahí no se sentían discriminados a diferencia de otros sitios.
“Aquí está la Playa de los Muertos, que no te mueres, pero te matan, literal, carnal”, expresó Adrián a un chico que entrevistó por las calles de la Zona Romántica de Puerto Vallarta, refiriéndose a la playa donde la comunidad gay puede ligar.
Incluso, en uno de los clips del video hay un hombre que de repente se le acerca a Adrián y le da el conocido como “llegue” al conductor mientras este se encuentra bailando en uno de los bares, cosa que no le molestó y lo vio hasta con agrado.
