Acabó el calvario: recibe familia restos de un desaparecido en 2018
Restos de Luis Armando Corral Yáñez fueron encontrados hace exactamente un año, casi 4 años del asesinato fueron entregados a su familia.
A través de diversos medios comenzó la difusión del cartel en el que se ofrecían 200 mil pesos para quien brindara datos que permitieran su localización; sin embargo, ni eso, ni el esfuerzo de sus familiares por encontrarlo fueron suficientes para que regresara con vida a casa.
Pero la certeza casi total que tenían de su muerte, no mermó su intención de encontrar, cuando menos, los restos de este varón originario de Balleza, Chihuahua.
Finalmente, casi cinco años después de la denuncia interpuesta el 22 de julio de 2018, volvieron a saber de él. No como deseaban, pero al menos ahora tienen restos de los cuales despedirse.
La información indica que Luis Armando fue privado de su libertad en Hidalgo del Parral, Chihuahua, sin que a la fecha se hayan difundido detalles del móvil de dicha acción.
Dado que testigos se dieron cuenta del delito, sus familiares denunciaron de inmediato, esperanzados en que la carrera casi segura contra la muerte, común en esos casos, tendría un final diferente.
Pero las cosas no marcharon como esperaban: las pistas que sus ahora deudos encontraban, los llevaron siempre a un callejón sin salida. Pasadas las semanas, recibieron la sugerencia de depositar en la Fiscalía de Chihuahua muestras para comparar ADN, para el caso de que la víctima fuera localizada y no identificable.
El 23 de marzo de 2022, cerca de Mesa de las Sandías, un paraje ubicado en el municipio de Ocampo, Durango, fueron localizados restos óseos. Dada la cercanía con Chihuahua y los acuerdos de coordinación, estos fueron trasladados a la Fiscalía Sur de aquella entidad.
La familia de Luis Armando se enteró del hallazgo, como de muchos otros, y a lo lejos observó el caso; pronto, se desvaneció de nuevo la esperanza de encontrar, siquiera, el cuerpo de su familiar.
No obstante, hace unos días, los llamaron de la Fiscalía ante la posibilidad de una coincidencia y, finalmente, se confirmó que aquellos huesos eran del muchacho de Balleza, asesinado cuando falta un mes para que cumpliera 31 años de edad.
De sus homicidas no se ha informado nada pero, cuando menos, la familia recibió por fin un cuerpo al cual llorarle.
De acuerdo al Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, un total de 3 mil 525 personas desaparecieron en Chihuahua desde el año de 1964 sin que a la fecha se haya logrado su localización. La mayoría de los casos se concentran en los 20 años más reciente
