En Nuevo León hay más de 6 mil personas desaparecidas
Desde 1964 hasta febrero del 2022 se tiene registrado que 6 mil 045 personas están desaparecidas en Nuevo León.
MONTERREY, Nuevo León.- El problema de las desapariciones de personas se ha generado en Nuevo León desde hace décadas, al grado de que a este 2022 más de 6 mil hombres y mujeres siguen sin ser localizadas y sus familias no pierden la fe de encontrarles.
La Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración dio a conocer que desde el año 1964 hasta febrero del 2022 se tiene un registro de 6 mil 045 personas reportadas como desaparecidas y que no han sido localizadas en Nuevo León.
De esta cifra, 4 mil 510 personas están en estatus de desaparecidas, y mil 535 personas aún no han sido localizadas.
Del total de personas desaparecidas y no localizadas, el 70.59 por ciento son hombres, es decir, 4 mil 267 varones han sido desaparecidos en estos últimos años; en tanto que referente a mujeres se han reportado mil 777 casos, es decir, un 29.40 por ciento.
En Nuevo León, los años 2010, 2011 y 2021 han sido los años con más reportes de víctimas de desaparición, siendo incluso el año pasado el más alarmante por la cantidad de casos generados.
El rango de edad promedio de las víctimas de desaparición es de 20 a 40 años, siendo este grupo el que más casos ha registrado en estas décadas.
A la fecha en la entidad se han localizado sin vida a 437 personas que fueron reportadas como desaparecidas, pero también 6 mil 526 han sido localizadas con vida.
Mujeres desaparecidas
Desde 1964 a febrero del 2022 se han acumulado mil 777 casos de mujeres desaparecidas y no localizadas, de las cuales 63 han sido localizadas sin vida.
En este aspecto, un alto porcentaje de las víctimas tenían en su momento de entre 15 a 25 años.
Niñas, niños y adolescentes
En Nuevo León se tiene como no localizados y desaparecidos a mil 144 niñas, niños y adolescentes.
De este grupo de edad, 27 menores de edad reportados como desaparecidos fueron localizados sin vida.
Familiares en pie de lucha
Las familias de víctimas de desaparición, han tenido que cargar con una cruz muy pesada porque más allá de no claudicar en la lucha para buscar a sus hijos, esposos, hermanos, padres o madres, han tenido que vivir un martirio en el camino ante el poco avance de las investigaciones.
Pero sin importar ello, el amor y la esperanza de volverlos a ver es lo que los mantiene con ese ánimo de no dejar de buscar.
Por ello, también se han creado colectivos y asociaciones, donde tienen un gran apoyo.
