Entre bromas y realidad; los atentados en escuelas de Nuevo León
Pese antecedentes trágicos, la mayoría de las amenazas de tiroteos en escuelas que se dan a conocer en redes sociales son falsas, provocando con ello histeria y temor.
NUEVO LEÓN.- Entre bromas, retos y hasta acciones que superaron la ficción, es como se han desarrollado las amenazas y atentados directos en escuelas de Nuevo León, donde en su mayoría son los adolescentes que encabezan los llamados.
Al ser una etapa compleja, la adolescencia y juventud, donde se vive un remolino de emociones y ante la situación actual que se vive, el uso de redes sociales ha sido un detonante importante para alertar sobre ataques violentos, donde trágicamente se ha llegado solo a concretar un hecho.
De acuerdo a archivos periodísticos, el 18 de enero del año 2017 en las instalaciones del Colegio Americano del Noreste, una institución privada ubicada al sur de Monterrey, un Federico N de 15 años, accionó un revólver calibre 22 en contra de su profesora y sus compañeros.
El atentado en el colegio Americano del Noreste ha sido el único ataque de grandes magnitudes que dejó al menos dos muertos y tres heridos, con ello dejando un precedente relevante, donde las autoridades han tomado cartas en el asunto y ante cualquier llamado acuden de inmediato.
Sin embargo, pese a esta tragedia de forma aislada, ocurrieron amenazas de atentados en universidades privadas y escuelas públicas, tan siquiera en los dos años siguientes de este hecho.
Ejemplo de ello fue que a finales del 2017 se atendió un llamado en una prepa del Tecnológico de Monterrey, por presunta amenaza, situación que fue controlada y resultó ser falso el llamado.
En el año 2018, las amenazas y llamados falsos disminuyeron, situación que persiste hasta el tercer trimestre del 2019.
En tanto que en los últimos tres meses del 2019, se tuvo una situación peculiar, al dispararse de forma considerada los llamados por amenazas en primarias, secundarias, preparatorias y hasta facultades, trayendo una histeria colectiva, en este periodo, se registraron hasta más de 15 llamados falsos.
La administración pasada, donde también la Secretaría de Seguridad estuvo encabezada por Aldo Fasci, pusieron en la mesa el sancionar a quienes hacían estas acciones, ya que por generar likes buscaban espantar a sus compañeros con estos llamados.
Situación que perduró hasta el primer trimestre del 2020, donde este tipo de alerta se dispararon de forma considerable.
Ejemplo de ello, en la última semana de enero del 2020, siete de las amenazas reportadas en distintas instituciones, cuatro de ellas se reportaron al sur de Monterrey.
Sin embargo, al declararse pandemia en el 2020, las clases de forma presencial se suspendieron, trayendo consigo un respiro a este tema, tal y como en el 2021, donde no se registró ningún llamado.
Pese a ello, ahora con el uso de redes sociales se han potencializado las amenazas de tiroteos en escuelas tras el regreso a clases presenciales desde el mes de febrero del 2022.
Tan solo en marzo y abril, en preparatorias y facultades, tanto privadas como públicas, se creó una psicosis al alertar sobre atentados y tiroteos en contra de mujeres estudiantes, tras exponer casos de violencia física y sexual.
Además de que también entre los casos más sonados de movilización por presuntos ataques fue el 7 de marzo en un kinder del municipio de Juárez y fue el 28 de febrero en donde una de las alertas resultó verdadera ahora en las instalaciones del Cecyte en Apodaca, pero se logró interceptar al atacante y tras investigaciones le localizaron armas de fuego.
Y de ahí, fue apenas el 25 de mayo, cuando un alumno de la primaria Centenario de la Revolución en Hacienda el Palmar en Santa Catarina se centró la atención luego de que un estudiante amenazó a sus compañeros con un arma blanca, lo anterior se da a un día de que lamentablemente se concretará una balacera en una primaria en Texas, que ha dejado a 21 personas fallecidas.
Aunque en Nuevo León no es una tendencia que vaya a el alza los tiroteos, los atentados violentos entre compañeros como insultos, golpes y agresiones sexuales si se han seguido dando.
