Conociendo el proceso del tenista...de novato al alto rendimiento

De los 6 a los 16 años es la edad más importante para que un tenista se desarrolle y llegue a la madurez como deportista.

Y si el coach de tu hijo o hija tenista le niega la oportunidad de avanzar en ese proceso de desarrollo, cambia de coach lo más pronto posible porque solo está buscando su propio beneficio económico y no el del jugador ni del tenis en general.

Esta afirmación no es mía, surge de una excelente reflexión que hace el entrenador español Jorge Mir Mayor, quien tiene más de 30 años dedicado a ser director de clubes de tenis en su país y conoce ampliamente del proceso que debe seguir un tenista desde sus inicios hasta el alto rendimiento.

En su artículo “SON SOLO 10 AÑOS”, que a continuación les compartiré, Jorge afirma que ese rango de edad es de suma importancia porque al final el trabajo que el entrenador y los papás hagan en conjunto definirá el camino que tomará el niño o adolescente, si quiere continuar en el tenis social, el alto rendimiento… o si deciden abandonar el tenis.

Aquí va la reflexión:

En este comienzo de enero de 2023 vamos a tener en las escuelas de clubes y academias a muchos niños con la edad de 6 años.

Estos niños dentro de 10 años tendrán 16 años y de nosotros como entrenadores y de los padres como educadores en casa, depende que aprendan a jugar bien y a que disfruten de este deporte, para que cuando lleguen a esas edades no ABANDONEN EL TENIS y quieran continuar jugando socialmente o profesionalmente.

De los 6 a los 16 años podemos entrenar muy bien la parte técnica, táctica, física y mental de forma divertida y por ello no podemos fallar y tenemos que tener calma y paciencia en el aprendizaje de cada niño y para ello debemos ser muy profesionales en nuestro trabajo.

La paciencia y la calma son muy importantes en la vida, pero en el tenis son fundamentales, por ello durante estos 10 años los padres no pueden ponerse nerviosos en su progresión y en los torneos, ya que son una pieza fundamental en el crecimiento tenístico de su hijo/a.

Son 10 años para que los niños disfruten y aprendan en su club o academia y también participen en los torneos de forma tranquila y relajada junto con sus entrenadores y padres.

Y a partir de los 16 años, el que quiera ser un profesional de este deporte, tendrá que entrenar muy duro en las escuelas de competición de los clubes o academias para aspirar a ser de los mejores tenistas del mundo.

Hasta aquí la reflexión de Jorge, y la enseñanza que nos deja, es que los papás y directivos de los clubes y academias deben estar muy atentos al proceso de los tenistas infantiles y juveniles para que su desarrollo sea el adecuado y que los entrenadores no los obliguen a estancarse en busca de beneficios personales.

Un novato no puede ser novato toda su vida, el tenis social no tiene nada de malo, pero en el alto rendimiento es donde se abren muchas puertas de viajes, becas escolares y por qué no, el profesionalismo.

Deseo que el 2023 esté lleno de tenis para todos.