El cansancio emocional
El agotamiento mental puede provocar cansancio emocional, al estar mentalmente agotado, resulta más difícil equilibrar nuestras respuestas emocionales
CIUDAD DE MÉXICO.- Hola, ¿qué tal? Yo soy Carolina Hernández y este es Sin Esdrújulas, tu micro mini pódcast en el que escribo cosas que luego leo para no llorar de puro pinche cansancio mental.
Porque sí, queridas, queridos, querides todes, esta semana se lloró. Se lloró de puro cansancio.
¿Por qué la fatiga mental es real?
El agotamiento mental es el cansancio que siente nuestro cerebro cuando le sobrecargamos con una acumulación de tareas, deberes, preocupaciones, todo en todos lados al mismo tiempo.
Este cansancio afecta al cerebro y desencadena una serie de procesos bioquímicos en el cuerpo y de respuestas emocionales poco placenteras.
A mí me pasó por ejemplo, que volvió el insomnio. No podía dormir porque no podía dejar de pensar en los pendientes y se pone nivel dos cuando además una canción se atraviesa y sigue sonando en tu mente encima de tu voz sacando cuentas de las cosas que te falta por hacer.
Que por cierto, paréntesis, la experiencia de tener una canción en la cabeza tiene un nombre, se llama “imaginario auditivo involuntario” o “gusano auditivo” y sucede cuando se repite una fragmento de entre 15 y 30 segundos de una canción. Puede ocurrir de manera repentina y durar varios minutos o días.
- Sucede con mayor frecuencia en personas que sufren de ansiedad.
Pero volvamos al cansancio mental, sentirse agotado mentalmente es desgastante. Estar mentalmente fatigado hace que no estemos alerta, nos lleva más tiempo de lo habitual completar las tareas.
A mí me pasó que comencé a olvidar palabras simples. No recordaba el nombre de una fruta…
La fatiga emocional disminuye nuestra capacidad de atención y concentración y es un círculo en el que como no te concentras, haces menos cosas y como haces menos cosas, se te juntan y como se te juntan, te agobias y como te agobias… sí, todo mal.
Pero además, nos pone emocionalmente muy vulnerables. Nos sentimos más tristes o somos más irritables. E
Porque el agotamiento mental puede provocar agotamiento emocional, al estar mentalmente agotado, resulta más difícil equilibrar nuestras respuestas emocionales.
¿Cómo combatimos…?
En la medida de lo posible, una vez que identifiquemos la causa del agotamiento mental o emocional, veamos si podemos reducir o delegar.
Yo recomiendo mucho agendar descanso. Así como tienes programadas cosas para hacer, programa cosas para no hacer. De 5 a 6 voy a ver el techo. Toma agüita.
Una de las cosas que más recomiendan también es ubicar lo está fuera de nuestro control, en ese momento es importante concentrarnos en el presente.
¿Qué estoy haciendo ahorita?
Nuestro cuerpo a menudo interpreta el estrés como una amenaza para la supervivencia.
Cuando esto sucede, el cerebro libera hormonas que contribuyen aún más al agotamiento emocional.
Cuando nos concentramos en pequeños eventos del momento presente, el cerebro aprende que la amenaza no es tan terrible como pueda parecer a primera vista.
La cantidad de hormona del estrés liberada disminuye y puede sentirse más equilibrado emocionalmente.
Pongámonos siempre por encima de los pendientes, aprendamos a decir esto, no lo quiero hacer, sin culpa.
Normalicemos dejar de inventar excusas para no ir a algún lado. Querer pasar tiempo con nosotras debería ser suficiente razón. Nuestras necesidades son tan importantes como las de los demás.
Todas podemos sentir este cansancio emocional extremo de vez en cuando, pero si te sientes triste, desesperada y cansada mental y emocionalmente durante más de una semana o dos, una lloradita y a buscar ayuda profesional.