Violencia obstétrica en México, estas son las principales señales de alarma
La CNDH México juega un papel clave en la protección de estos derechos y en la denuncia de actos de violencia obstétrica.

CIUDAD DE MÉXICO.- En México existen diversos tipos de violencia hacia la mujer, y uno de ellos es la violencia obstétrica. Esta se manifiesta en el maltrato que sufre la mujer embarazada, quien puede ser juzgada, atemorizada, humillada o lastimada tanto física como psicológicamente.
Generalmente ocurre en los lugares que prestan servicios médicos y las mujeres están expuestas a este tipo de maltratado sin importar a que clase social pertenecen.
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¿Qué es la violencia obstétrica y cómo afecta a las mujeres en México?
La violencia obstétrica está íntimamente relacionada con la violencia institucional y la violencia de género. Se puede manifestar a través de gritos, maltratos, mala atención o incluso en formas graves y peligrosas, como intervenciones no autorizadas.
Según la Asamblea Legislativa de Venezuela (2007), 'se entiende por violencia obstétrica la apropiación del cuerpo y procesos reproductivos de las mujeres por personal de salud, que se expresa en un trato deshumanizador, abuso de medicalización y patologización de los procesos naturales, lo que trae consigo la pérdida de autonomía y capacidad de decidir libremente sobre sus cuerpos y sexualidad, afectando negativamente la calidad de vida de las mujeres.'
Por otro lado, el colectivo Parto Libre/GIRE define la violencia obstétrica como: “Toda acción u omisión por parte del personal de salud que dañe, lastime o denigre a la mujer durante el parto, así como la negligencia en su atención médica que se exprese en un trato deshumanizado y/o discriminatorio. Se incluye el abuso de la medicalización y patologización de los procesos naturales, vulnerando los derechos a la autonomía, libertad reproductiva y al consentimiento informado, además de la omisión de atención oportuna y eficaz ante emergencias obstétricas.”
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¿Cuáles son los tipos de violencia obstétrica más comunes en los servicios de salud?
La violencia obstétrica también es una respuesta a una sociedad machista, aunque puede ser perpetrada por cualquier persona, independientemente de su género. Esta forma de violencia se manifiesta en las estructuras sanitarias y en una disciplina médica que históricamente ha estado dominada por hombres. Entre las expresiones de violencia de género en el ámbito médico, se incluyen:
- Maltrato físico y discriminación.
- Humillación y menosprecio del dolor.
- Colocación de métodos anticonceptivos sin aprobación.
- Realización de cesáreas obligadas.
- Violación de la privacidad.
- Negación de tratamiento.
- Detención en las instalaciones de salud por falta de pago.
Además, la gineco-obstetricia ha sido históricamente una especialidad médica dominada por hombres, lo que ha generado una visión masculinizada tanto en la teoría como en la práctica clínica, y en la formación del personal médico en ginecología y obstetricia.
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¿Qué acciones debe tomar el personal de salud para evitar la violencia obstétrica?
En México existen diversas campañas enfocadas en erradicar y prevenir la violencia obstétrica, como las iniciativas que se celebran durante el Día Naranja o el 8M. El personal de salud tiene la responsabilidad de promover prácticas adecuadas durante el embarazo, parto y puerperio, asegurando un trato digno, de calidad y con respeto a los derechos humanos, sexuales y reproductivos de todas las personas que acuden a los servicios médicos.
Entre las situaciones de violencia obstétrica más comunes se encuentran:
- La práctica de una cesárea sin el consentimiento claro y voluntario de la mujer, cuando existe la posibilidad de un parto natural.
- Obligar a la mujer a parir en una posición acostada y/o inmovilizada.
- Impedir que la mujer cargue o amamante a su bebé inmediatamente después del nacimiento.
- No atender las emergencias obstétricas de manera oportuna y adecuada.
Además de las formas físicas de violencia, la violencia obstétrica también puede manifestarse psicológicamente. Esto incluye un trato infantil, paternalista, autoritario, despectivo o humillante, junto con insultos verbales, despersonalización o vejaciones.
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Las campañas contra la violencia obstétrica promueven también que las mujeres:
- Conozcan sus derechos.
- Exprese dudas o inquietudes sobre su embarazo, parto y postparto.
- Reciban información clara, oportuna y veraz sobre la atención y los procedimientos médicos.
- Tomen decisiones sobre el momento adecuado entre embarazos y el método anticonceptivo que mejor se ajuste a sus necesidades.
- Se tengan en cuenta las necesidades emocionales, sociales y culturales de las mujeres y sus familias.
- No se realicen procedimientos obstétricos de forma rutinaria sin una justificación médica adecuada.
- Se incluya la participación de parteras, especialistas en obstetricia, neonatología y enfermería.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos de México trabaja para prevenir y erradicar la violencia obstétrica. Si tú o alguien cercano ha vivido esta situación, está disponible para ofrecer apoyo.
Correo: mailto:correo@cndh.org.mx.
Teléfonos: 5556818125 / 8007152000