
En un mundo saturado de estímulos tecnológicos y demandas interpersonales, la niebla mental puede parecer una consecuencia inevitable.
En un mundo saturado de estímulos tecnológicos y demandas interpersonales, la niebla mental puede parecer una consecuencia inevitable.
El ISSEMYM advirtió de un incremento de ansiedad, depresión y otros padecimiento mentales en las y los jóvenes agravados por el uso excesivo de redes sociales y el bullying.