Este es el árbol nativo de Nuevo León que con su fruto se puede elaborar una deliciosa conserva
La zona citrícola de Nuevo León alberga un fruto que no solo representa tradición, sino también una fuente de desarrollo económico y orgullo regional: la naranja ombligona de Montemorelos.
Proveniente del árbol de naranjo (Citrus sinensis), esta variedad destaca por su sabor dulce, facilidad para pelar y una peculiar protuberancia que le da su característico “ombligo”.
¿Dónde es cultivada principalmente?
Cultivada principalmente en Montemorelos, Nuevo León, municipio considerado como La capital de la naranja en México, esta fruta forma parte esencial de la identidad agrícola del estado.
La combinación de clima templado y suelos fértiles hace de esta región el sitio ideal para el cultivo de cítricos, colocándola como una de las principales productoras de naranja ombligona del país.
¿Aparte de su frescura, qué más se disfruta de esta naranja ombligona?
La naranja ombligona no solo se disfruta fresca, sino que también es protagonista en la elaboración de conservas y mermeladas típicas del noreste mexicano, gracias a su jugosidad y sabor balanceado.
Estos productos son altamente valorados tanto por su sabor como por su carácter artesanal.
¿Se ha considerado para una celebración o tradición en el municipio de Montemorelos?
- Cada año, Montemorelos celebra la Feria de la Naranja, un evento que honra la cosecha con danzas, música y exhibiciones.
- También se festejan tradiciones religiosas ligadas al campo, como la fiesta de Nuestra Señora de la Purificación.
- La naranja ombligona impulsa el turismo local y las actividades comerciales.
- Su cultivo sostenible ayuda a fortalecer la economía del noreste mexicano.
En esta festividad se combinan actividades culturales, exposiciones agrícolas, música regional y danzas tradicionales, atrayendo a visitantes de toda la entidad y estados vecinos.
¿Se ha distinguido en otros municipios?
Junto con otros municipios de la zona citrícola como General Terán y Linares, Montemorelos ha forjado una larga historia de producción cítrica, sustentada por generaciones de familias dedicadas a este cultivo.
Además de su valor económico y cultural, la naranja ombligona es también una oportunidad para redescubrir recetas tradicionales del estado, como la conserva de naranja, que puede prepararse en casa y disfrutarse durante todo el año.