Así fue el día que Mario Vargas Llosa golpeó a Gabriel García Márquez en el Palacio de Bellas Artes
Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez protagonizaron una pelea en Bellas Artes, lo que terminó con su amistad de varios años
CIUDAD DE MÉXICO.- La tarde de este domingo 13 de abril, el mundo de las letras se vistió de luto con el fallecimiento de Mario Vargas Llosa a los 89 años en Lima, Perú.
Por su basto legado es considerado uno de los máximos exponentes del “Boom latinoamericano”, junto a Julio Cortazar y Gabriel García Márquez, con quién tuvo un enfrentamiento que quedará grabado en la historia del Palacio de Bellas Artes.
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¿Cómo fue la pelea entre Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez en el Palacio de Bellas Artes?
Todo ocurrió durante una noche de febrero de 1976, cuando ambos escritores asistieron a una función de cine en el Palacio de Bellas Artes, en la Ciudad de México.
De acuerdo con los testigos, García Márquez extendió los brazos a Vargas Llosa, al verlo en el vestíbulo del recinto, pero este le propinó un puñetazo en el rostro diciendo:"¡Esto, por lo que le hiciste a Patricia en Barcelona!", o ¡Esto, por lo que dijiste a Patricia en Barcelona!” (las versiones de los presentes varía).
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¿Cómo fue la relación entre Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez después de la pelea?
Ninguno de los dos aclaró el tema, siendo un gran misterio lo sucedido y fracturando la amistad que ambos autores mantenían desde finales de los años 60, aunque existen diversas versiones del porqué ocurrió el golpe.
Algunas teorías señalan que Gabriel García Márquez aconsejó a Patricia Llosa durante una crisis matrimonial, lo que el peruano consideró como una traición. Otra versión apunta que las posturas ideológicas terminaron por distanciarlos.
Aunque ambos ganadores del Premio Nobel de Literatura no se reconciliaron e incluso evitaron hablar del tema públicamente, pero siempre mantuvieron el respeto mutuo por sus trabajos.
Ambos escritores dejaron un gran legado literario para el mundo, y aunque nunca conoceremos realmente lo que pasó esa noche de febrero, este momento histórico quedó grabado en los pasillos de un lugar tan importante para la Ciudad de México como es el Palacio de Bellas Artes.
Lo cierto es que ambos ganadores del Premio Nobel de Literatura no se reconciliaron e incluso evitaron hablar del tema públicamente, pero siempre mantuvieron el respeto mutuo por sus trabajos.
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