Divertida y sangrienta. Lee la crítica de 'Renfield: Asistente de Vampiro'
Nicholas Hoult y Nicolas Cage protagonizan 'Renfield: Asistente de Vampiro', comedia con tintes de horror que llegó este jueves a cartelera
MONTERREY, Nuevo León.- La frase de 'mi jefe es un monstruo' es sin duda una que muchos de nosotros hemos utilizado en al menos una ocasión para referirnos a un patrón que disfruta hacer infelices a sus empleados.
En 'Renfield: Asistente de Vampiro', filme que llegó a cartelera este jueves, dicha frase la toman de manera literal y muestran a un joven que trabaja para el peor jefe posible del mundo: Drácula.
La trama sigue a Robert Montague Renfield, quien es el encargado de conseguirle las víctimas al llamado 'Príncipe de las Tinieblas', esto hasta que un buen día decide darle un giro a su vida.
El primer gran acierto que tiene la nueva cinta del director, Chris McKay, son sus protagonistas, Nicholas Hoult y Nicolas Cage, quienes vuelven a trabajar juntos después de compartir escena hace 17 años en el filme, 'El Sol de cada Mañana'.
Los actores arman una estupenda mancuerna en escena; el británico transmite correctamente la ingenuidad de su personaje, mientras que el estadounidense está más que perfecto como el villano, papel que pareciera nació para interpretar.
Por otra parte, aunque el guión de Ryan Ridley y Robert Kirkman no está a la altura de sus estelares, éste consigue sacarle al espectador varias risas y cuenta con secuencias de acción bastante entretenidas.
Si bien al final te deja con la idea de que sus protagonistas pudieron ser explotados de mejor manera, esta comedia con tintes de horror cumple su propósito de divertir a la audiencia durante hora y media.
