Prohiben tecnología china y rusa en vehículos estadounidenses
Estados Unidos prohíbe la venta de vehículos conectados con tecnología china o rusa, citando riesgos de seguridad nacional.
WASHINGTON DC, Estados Unidos.- El Departamento de Comercio de Estados Unidos ha decidido prohibir la venta de vehículos conectados que utilicen tecnología de origen chino o ruso, citando preocupaciones de seguridad nacional.
Esta medida se enmarca dentro de un endurecimiento de las políticas del presidente Joe Biden hacia China, y sigue a una investigación iniciada en febrero sobre los riesgos asociados con la tecnología china en la industria automotriz.
🇺🇲⚔️🇨🇳 EEUU prohibirá el uso de software y hardware chinos clave en vehículos conectados en las carreteras estadounidenses debido a preocupaciones de #seguridad_nacional, una medida que impediría de hecho la entrada de casi todos los #cochesChinos en el mercado estadounidense.… pic.twitter.com/NUHWT6JKei
— netsysmX (@netsysmx1) September 23, 2024
La nueva norma, que se anunció este lunes 23 de septiembre, se enfoca en el software y hardware que conectan los vehículos con el exterior, un aspecto cada vez más relevante dado que los autos modernos, incluidos los eléctricos y autónomos, dependen de la electrónica para interactuar con dispositivos personales, otros vehículos y la infraestructura vial.
La Oficina de Industria y Seguridad del Departamento de Comercio advirtió que el acceso malintencionado a estos sistemas podría permitir a actores hostiles obtener datos sensibles y, en el peor de los casos, tomar control remoto de los automóviles en circulación.
La American Automotive Policy Council, que representa a grandes fabricantes como General Motors, Ford y Stellantis, no ha comentado aún sobre la nueva normativa.
Endurecen Estados Unidos medidas contra China
En respuesta, China expresó su preocupación, advirtiendo a Estados Unidos sobre las 'medidas discriminatorias' contra sus empresas.
Además, el gobierno de Biden recientemente implementó un arancel del 100% sobre los vehículos eléctricos chinos, en un contexto de creciente tensión comercial entre ambas naciones.
Aunque no se especificaron qué fabricantes o modelos se verían afectados, la norma estará abierta a comentarios del público durante 30 días.