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Por: Armando Gallegos
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Like o No Like Boda El Canelo
Hace muchos años que en México no se celebraba una boda que pueda considerarse “del año” o hasta “del siglo”, bien sea por la importancia de uno o ambos contrayentes, o por la fastuosidad del evento.
Hace muchos años que en México no se celebraba una boda que pueda considerarse “del año” o hasta “del siglo”, bien sea por la importancia de uno o ambos contrayentes, o por la fastuosidad del evento. Otras bodas famosas en México, como la de Lucero y Mijares o la de Bibi Gaytán y Eduardo Capetillo, fueron mediáticas, porque los protagonistas eran figuras de Televisa y la empresa realmente lucró con las ceremonias. Pero ni la reciente boda de Alejandro Fernández Jr. ni la de Anahí con el gobernador Manuel Velasco han tenido el impacto que en su momento tuvieron la boda de la finada Christian Bach y Humberto Zurita, Thalía y Tommy Motola o Angélica Rivera y el expresidente Enrique Peña Nieto.
Pues este sábado 22 de mayo se realizó la boda religiosa de Saúl “Canelo” Álvarez y Fernanda Gómez, a solo una semana de la boda civil, realizada a todo lujo en Punta Mita, Nayarit, siete días después de la victoria en la que Saúl noqueó y mandó al hospital al británico Billy Joe Sanders, el 8 de mayo.
Aunque los detalles intentaron mantenerlos en secreto para evitar la presencia de los paparazzi y tumultos que pudieran ensombrecer la fiesta, los medios de comunicación nos enteramos de la iglesia y elugar que fue en el rancho del multicampeón de boxeo. Como es de esperar, hubo la presencia de gran cantidad de personalidades de la política y algunos deportistas y gente de los medios de comunicación y la farándula.
Se pidió a los invitados no llevar teléfonos celulares, para evitar la filtración de videos, como pasó con la boda civil, donde cantó la chilena Mon Laferte, porque es probable que se haya vendido la exclusividad a algún medio de comunicación. Por supuesto, no es una cuestión de dinero, que a Saúl no le hace falta, sino de manejo de imagen. Y para evitar colados, los invitados fueron llevados al rancho en camionetas alquiladas exprofeso. Yo tuve oportunidad de ver con anticipación el montaje del escenario para la fiesta, que fue amenizada por Banda El Recodo, Maná y Los Ángeles Azules. Un cartel millonario, a la altura de la fama y la fortuna del boxeador mexicano más exitoso de los últimos tiempos; quizá no el mejor arriba del ring, pero sí el que más mediático, por su personalidad sencilla y su buen corazón; pues así como ahora gastó una millonada para su boda, también ha soltado grandes cantidades con fines altruistas, y de eso no cualquiera puede presumir. Felicidades a Saúl, a su esposa y a su hija María Fernanda.